“Hasta hace bien poco, España era un país de torrefacto, la peor versión del café que existe, pero la llegada de las cápsulas ha mejorado nuestra cultura cafetera”, asegura Pablo Caballero, barista que trabaja en Mokka Shop, en Madrid, donde realizan cursos de fin de semana para enseñar a hacer y apreciar el buen café. Durante mucho tiempo hemos pensado que cuanto más amargo y oscuro, mejor; sin embargo, uno de los mejores que existen, el arábica, es tan dulce que no es necesario echarle azúcar.
Y en cuanto al modo de prepararlo, cada uno tiene un resultado diferente, dependiendo del café que elijamos y del tratamiento que le demos. Todos ellos más deliciosos que el expreso de toda la vida. Estos son cuatro ejemplos de las técnicas más cool.
Inventada en 1941, esta cafetera vuelve a estar de moda. No en balde, está expuesta en el MoMA de Nueva York. Destaca por su diseño y funcionalidad.
Preparación. Pon el filtro de papel, mójalo con agua caliente y tírala. Muele 30 g de café (medio-grueso) y añádelos al filtro. Realiza una preinfusión de 60 ml de agua durante 30 s y añade el resto regularmente hasta los 500 ml.
Se trata de un gotero de agua fría que infusiona el café con lentitud (de 12 a 24 horas). Da una bebida suave, dulce, baja en acidez e ideal para tomar con hielo.
Preparación. Muele gruesos 60 gramos de café arábica natural con tueste fresco; empápalo con agua fría y coloca el filtro encima. Llena el depósito superior de agua fría, mejor con hielo, y regula el gotero para que caiga una gota cada 3 segundos.
Este artilugio para hacer café provocando el vacío nos da una taza delicada, parecida a una infusión de té, ideal para amantes de los cacharros de laboratorio.
Preparación. Echa agua caliente en la parte inferior del sistema y ciérralo con la parte superior. Enciende la fuente de calor y, una vez que suba el agua, baja el fuego. Quita la fuente de calor y el café empezará a bajar, con lo que se obtiene la infusión final.
Del inventor del frisbee, hace un café intenso y con cuerpo.
Preparación. Pon el filtro y mójalo con agua caliente. Muele 15 g de café (medio-fino) y mételo en el Aeropress. Vierte 30 ml de agua a 90ºC y remueve. Espera 30 s y vierte 160 ml, hasta llenarlo. Espera un minuto, remueve. Coloca el filtro y saca el aire sobrante. Cambia el sentido del Aeropress y colócalo sobre el recipiente final. Presiona.
Frigorífico con estrellas
Más de 60 (de las Michelin) reúnen los 40 chefs, entre los que están el catalán Joan Roca y el vasco Andoni Aduriz, que protagonizan este libro. Inside Chefs’ Fridge (Ed. Taschen) es un ejercicio de voyeurismo culinario en el que se desnudan los frigoríficos privados de los galácticos de la cocina mundial.
Aunque parezca algo descabellado, es posible que en los largos días en la Estación Espacial Internacional alguien eche de menos tomarse una copa. Pensando en esto, Ballantine’s ha presentado un vaso al que llaman Space Glass, que dicen que ha sido probado en microgravedad para que no pierda ni una gota.
Robot de cocina de cápsulas
Genie es una máquina que cocina en solo un minuto, a partir de cápsulas con los ingredientes deshidratados, platos elaborados por los mejores chefs. Está a la venta en geniethefreshway.com y cuesta 500 €.