Un equipo de científicos de la Academia China de Ciencias, liderados por Qi Zhou, lograron producir ratones sanos a partir de información genética obtenida de dos hembras. Las crías luego tuvieron su propia descendencia normal.

Por su parte, también nacieron ratones de dos padres, pero solo sobrevivieron por unos días. El estudio, publicado en la revista Cell Stem Cell, analiza lo que hace que sea tan difícil para los animales del mismo sexo producir descendencia y sugiere que algunas de estas barreras pueden superarse utilizando células madre y edición de genes específicos.

«Estábamos interesados ​​en la pregunta de por qué los mamíferos solo pueden experimentar reproducción sexual – explica Zhou en un comunicado –. Hemos realizado varios hallazgos en el pasado mediante la combinación de reproducción y regeneración, por lo que tratamos de averiguar si era posible producir ratones con dos hembras, o incluso con dos machos, utilizando células madre embrionarias haploides con supresiones de genes”.

Si bien algunos reptiles, anfibios y peces pueden reproducirse con dos progenitores del mismo sexo, es un desafío para los mamíferos hacer lo mismo, incluso con la ayuda de la tecnología de fertilización. En los mamíferos, debido a que ciertos genes maternos o paternos se desactivan durante el desarrollo de la línea germinal mediante un mecanismo llamado impronta genómica, los descendientes que no reciben material genético de una madre y un padre pueden experimentar anormalidades del desarrollo o no ser viables. Al eliminar estos genes, los investigadores han producido ratones bimaternos (ratones con dos madres) en el pasado. «Sin embargo, los ratones generados todavía mostraban características defectuosas, y el método en sí era muy poco práctico y difícil de usar», dice Zhou.

Para producir sus ratones bimaternos sanos, Zhou, utilizó células madre embrionarias (ESC por sus siglas en inglés) haploides, que contienen la mitad del número normal de cromosomas y ADN de un solo padre y esa habría sido la clave de su éxito. Los investigadores crearon los ratones con dos madres al eliminar tres regiones de impronta del genoma de las ESC haploides que contenían el ADN de una madre y las inyectaron en óvulos de otra hembra. En total produjeron 29 ratones vivos de 210 embriones. Los ratones eran normales, vivieron hasta la edad adulta y tuvieron sus propias crías.

También consiguieron producir doce ratones vivos a partir de dos padres genéticos utilizando un procedimiento. Estos sobrevivieron 48 horas, pero los investigadores planean mejorar el proceso para que los ratones bipaternos vivan hasta la edad adulta.

Juan Scaliter