Las serpientes marinas, pese a estar rodeadas de agua, a veces viven una existencia sedienta. Hasta ahora los científicos pensaban que estos animales podían beber agua de mar, pero investigaciones recientes han demostrado que necesitan acceder a agua dulce. Ahora, un nuevo estudio, publicado en PlosOne y liderado por Harvey Lillywhite, señala que las serpientes marinas que viven donde hay sequía alivian su deshidratación tan pronto como llega la estación húmeda, y lo hacen obteniendo agua fresca de parches que se forma en la superficie del océano durante una lluvia intensa: eventos en los que la salinidad en la superficie disminuye lo suficiente para que el agua sea potable.

La serpiente marina amarilla (Hydrophis platurus) es el único reptil en el orden Squamata que vive en mar abierto. Tiene uno de los rangos geográficos más grandes de cualquier especie de vertebrado. Debido a su amplia gama y existencia marinera, durante la temporada seca (entre 6 y 7) no tiene acceso a agua dulce. La forma en que sobreviven en regiones de sequía parece depender del acceso a los mencionados parches de agua dulce, pero se sabe poco sobre cómo reaccionan los vertebrados marinos o cómo es su consumo de agua. “Este estudio contribuye a una comprensión más completa de cómo las serpientes marinas pelágicas, y posiblemente otros animales marinos, evitan la deshidratación después de una sequía estacional en el mar”, explica Lillywhite.

Los investigadores capturaron 99 serpientes marinas frente a las costas de Costa Rica y les ofrecieron agua dulce en un entorno de laboratorio. Sucedió que el equipo estuvo allí justo cuando terminó la sequía y la lluvia había comenzado. Los investigadores descubrieron que apenas el 13% de las serpientes capturadas después de la lluvia, “aceptó la oferta” de los científicos, en comparación con el 80% de las que capturaron antes que terminara la sequía.

«La forma en que estos animales localizan y utilizan las precipitaciones es importante en vista de las recientes disminuciones y extinciones de algunas especies de serpientes marinas – concluye , Lillywhite –. La pregunta es: ¿Cómo afectarán el cambio climático y sus efectos sobre la precipitación a las serpientes marinas?”

Juan Scaliter