La reciente nominación de Donald Trump, como candidato al premio Nobel de la Paz por sus negociaciones con Kim Jong, líder de Corea del Norte, han alzado muchas cejas. Pero no es la primera vez que ocurre algo así. Este galardón tiene un pasado polémico por algunos de sus ganadores. Y, para qué negarlo, también por algunos que se quedaron fuera.
Cordell Hull
En 1945 el Premio Nobel de la Paz fue para Cordell Hull, por su papel determinante en el establecimiento de la ONU. Pero 6 años antes Hull, por entonces secretario de Estado del presidente Franklin D. Roosevelt, llegó a los titulares por otro motivo. Era el año 1939 y cada vez más judíos intentaban huir de la Alemania nazi. Más de 900 judíos zarparon desde Hamburgo hacia EEUU, a bordo del S.S. St. Louis, en busca de asilo. El presidente estaba dispuesto a recibir a los refugiados, pero Hull, junto con los demócratas del sur, expresó una fuerte oposición y amenazó con retirarle su apoyo en las siguientes elecciones si no se negaba. El 4 de junio de 1939, el Presidente denegó la entrada al barco, obligándolo a regresar a Europa, donde más de una cuarta parte de sus pasajeros murieron posteriormente en el Holocausto.
Harald zur Hausen
El ganador no siempre es el polémico o controvertido. En alguna ocasión la propia academia sueca resulta salpicada. Esto fue lo que ocurrió con el Premio Nobel de Medicina 2008, otorgado a Harald zur Hausen, por descubrir que el VPH (virus del papiloma humano) causa cáncer de cuello uterino. En cambio, lanzó una nube sobre toda la organización Nobel y dio lugar a una investigación de la policía sueca. Una unidad anticorrupción investigó cargos de influencia indebida contra AstraZeneca, una compañía farmacéutica que tenía una gran participación en dos vacunas contra el VPH, luego de que se supo que la compañía tenía fuertes vínculos con dos personalidades del comité de selección del premio de medicina. Aunque nunca se presentaron cargos, el proceso se complicó por el hecho de que AstraZeneca había comenzado a patrocinar iniciativas de la Fundación Nobel.
Unión Europea
Dado el nivel de polémico de este galardón, el apartado de Paz a menudo parece irónico. Kissinger y Le Duc Tho (en 1973), Arafat y Rabin (en 1994) y el último que trajo polémica fue el de la Unión Europea (en 2012), “por contribuir durante más de seis décadas al avance de la paz y la reconciliación, la democracia y los derechos humanos en Europa», según el comité de premios.
Muchos se quejaron de la elección, ya que la Unión Europea estaba lidiando con varios problemas económicos apremiantes, incluida la crisis de la deuda griega, y porque varios países europeos fabrican y venden armas.
“Alfred Nobel dijo que el premio debe ser otorgado a quienes trabajaron por el desarme – señaló en su momento Elsa-Britt Enger, representante de Abuelas para la Paz, en un informe de Reuters –. La UE no hace eso. Es uno de los mayores productores de armas del mundo».
Otros críticos incluyeron a los ex ganadores del premio. El arzobispo Desmond Tutu, Mairead Maguire de Irlanda del Norte y Adolfo Pérez Esquivel de Argentina, firmaron una carta abierta criticando la decisión y dijeron que la UE «claramente no es uno de los campeones de la paz que Alfred Nobel tenía en mente cuando creó el premio».
Fritz Haber
En 1918 este químico alemán recibió el Premio Nobel de Química por crear el proceso Haber-Bosch, una forma de producir amoníaco a gran escala. El avance ha demostrado ser crítico en la creación de fertilizantes para mejorar la agricultura y alimentar a miles de millones de personas.
Pero Haber también es conocido por ayudar a desarrollar el gas de cloro como un arma química durante la Primera Guerra Mundial y defender su uso en los conflictos armados. uso de la guerra de gases durante su vida. Algo que resulta irónico, ya que Alfred Nobel creó los premios por la preocupación de que solo fuera recordado por crear la dinamita.
Mahatma Gandhi (por omisión)
En 2006, el ex director del Instituto Nobel, Geir Lundestad, dijo que la mayor omisión en la historia del premio fue no otorgar el premio de la paz al activista político indio Mahatma Gandhi.
Según Lundestad, Gandhi fue preseleccionado cinco veces (dos veces antes de la Segunda Guerra Mundial, luego en 1946, 1947 y 1948), pero el punto de vista eurocéntrico del comité y su incapacidad para apreciar la lucha por la libertad en las colonias impidieron que Gandhi recibiera el premio. “Gandhi podría prescindir del Premio Nobel de la Paz, la pregunta es si el comité del Nobel puede prescindir de Gandhi”.
Otros que siempre han sido señalados como potenciales candidatos y nunca fueron galardonados se encuentran, principalmente entre los autores y dramaturgos más importantes por su influencia en la cultura. Por ejemplo James Joyce, Leon Tolstoy, Anton Chekhov, Marcel Proust, Henrik Ibsen, Mark Twain, George Orwell, Jorge Luis Borges y Arthur Miller.
Juan Scaliter