A lo largo de la historia de la biología en nuestro planeta, la vida multicelular evolucionó a partir de células individuales en numerosas ocasiones, pero explicar cómo ocurrió esto es uno de los mayores enigmas evolutivos. Sin embargo, un grupo de científicos de las universidades del Estado de Kansas, de Arizona, Witts y Tokio, han completado un estudio del genoma completo de uno de los organismos modelo más importantes, el Gonium pectorale, un alga con solo 16 células.
«La evolución de unicelulares a multicelulares – explica Pierre Durand, de la Universidad Witts – fue un gran cambio. Modificó la forma de nuestro planeta para siempre. Desde los gusanos a los insectos, los dinosaurios, las plantas con flores y los seres humanos, sólo hay que mirar alrededor y ver la extraordinaria diversidad de las formas multicelulares. Esto ha sido difícil de explicar y creo que llenamos una laguna en nuestro conocimiento”. La gran ventaja de las G. pectoralees que pertenece al grupo de las volvocinas que cuenta con diferentes grados de complejidad, por lo que es posible examinar las distintas etapas en el camino hacia la pluricelularidad.
Gracias al análisis del genoma de este organismo, los científicos descubrieron algunos de los genes que regulan el crecimiento celular y la división en este organismo. Este hallazgo ayudará a explicar cómo las células se reúnen para vivir en grupos, uno de los primeros pasos en el camino a una vida multicelular. La investigación ha sido publicada en Nature Communications.
Juan Scaliter