Numerosos estudios han demostrado que una dieta basada en el consumo de carne no es muy sostenible para el medioambiente, aunque dichos informes se referían únicamente al consumo humano. Pero, ahora, Gregory Okin, un investigador de la Universidad de California, ha publicado los primeros datos referentes al consumo de carne por parte de animales.
Según el informe de Okin, tan solo en Estados Unidos hay 160 millones de perros y gatos que consumen anualmente tanta proteína de origen animal como toda la población de Francia. De hecho, las mascotas consumen entre el 25 y el 30% de toda la carne que se produce en Estados Unidos.
Lo anterior supone que alimentar a perros y gatos con proteínas de origen animal provoca la expulsión a la atmósfera de 64 millones de toneladas de dióxido de carbono lo que, según este estudio, equivale a las emisiones anuales de 13 millones de coches.
Por si fuera poco, las mascotas americanas producen anualmente más de cinco millones de toneladas de heces, casi tanto como 90 millones de americanos. Y si estas cifras parecen grandes, imaginemos como serán si las sumamos las que puede haber en países como Rusia o China.
La conclusión del estudio parece clara: alimentar a las mascotas con carne tiene un coste medioambiental muy elevado. Pero, ¿cuál es la alternativa? ¿Convertir a los animales en vegetarianos?
Fuente: PLOS.
Vicente Fernández López