Soñaba con ser médico desde muy pronto. Aunque no tenía antecedentes familiares, el pequeño Javier se veía arrastrado a ello. De hecho, elegía acompañar a los empleados de su padre al médico solamente para poder luego discutir con el facultativo los casos y aprender un poco de esa profesión.
Videojuegos que curan
Cudeiro siguió la senda que le marcaba el destino y estudió medicina… para acabar siendo investigador. Es, de hecho, uno de los neurocientíficos españoles más destacados y con mayor futuro. Este verano dará el salto para seguir con sus experimentos en Harvard, tanto en la Universidad como en el prestigioso Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT). Solo será un año sabático, de aprendizaje y aventura, y siempre sin perder de vista su adorado NEUROcom, el laboratorio de la Universidade da Coruña que dirige.
¿Qué hace un médico investigando en neurociencia de vanguardia? “En otros países a lo mejor es un poco más raro”, explica él mismo, “pero en España es bastante habitual que personas con formación en medicina acaben en lugares como este. En los países anglosajones sueles encontrarte más con personas del campo de la biología”. Sigue, pues, la senda marcada por el gran médico-investigador de la historia de España, Santiago Ramón y Cajal, y luego desarrollada también por personajes como Gregorio Marañón.
[image id=»61476″ data-caption=»Cuartel general. Este es el laboratorio NEUROcom de la Universidade da Coruña en el que Cudeiro y su equipo realizan su investigación.» share=»true» expand=»true» size=»S»]Javier se crió pensando que se iba a dedicar a atender pacientes y ahora es el responsable de un laboratorio puntero en neurociencia. Aunque, ciertamente, por su laboratorio pasan los afectados por este tipo de dolencias para probar sus prototipos y realizar estudios. El objeto principal de investigación del NEUROcom se centra en el párkinson. En el laboratorio trabajan sobre la mejora de la actividad motora de los pacientes, con unos resultados que ahora mismo son prometedores.
El equipo de Cudeiro ha desarrollado un sistema de realidad virtual en tres dimensiones. Los pacientes de párkinson tienen que ponerse las características gafas de 3D y sensores en las manos, y pasan entonces a convertirse en una especie de personaje de videojuego. Al avatar en que se convierte el paciente se le ofrecen pruebas de habilidad, entre ellas caminar a cierto ritmo (y para ello cuentan con un tapiz rodante), abrir y cerrar puertas, coger objetos, etc.
“Hemos comprobado que los pacientes de párkinson andan con mayor soltura después de las pruebas”, explica el neurocientífico. El sistema se basa en fomentar en los pacientes, mediante la simulación, la estimulación y el uso de las zonas del cerebro implicadas en el movimiento. Para ello, además, cuentan con la ayuda de la Estimulación Magnética Transcraneal (TMS).
Enamorado de la neurograstronomía
Este TMS es un aparato capaz de estimular e inhibir determinadas partes del cerebro, algo que este periodista comprobó en carne propia viendo cómo dicha estimulación era capaz de moverle involuntariamente los dedos de una mano. El objetivo consiste en utilizar esta técnica, que es externa y no invasiva, como una pequeña raqueta de pádel que se coloca sobre la cabeza del paciente para inhibir determinadas zonas del cerebro implicadas en dolencias como la epilepsia y el párkinson.
Pero Javier Cudeiro, además de querer curar, es un enamorado del cerebro. Tanto, que lleva años apasionado por la neurociencia del gusto. Practica lo que podríamos denominar “neurogastronomía”, el estudio de la relación entre la comida y los procesos sensoriales asociados a ella. “El cerebro humano es una máquina de predecir el futuro. Al comer es fundamental lo que esperamos de un plato, y cocineros como Ferran Adrià tienen el éxito que tienen porque consiguen sorprender a nuestro cerebro, aportándonos unas percepciones que nunca son las que estamos esperando.”
Quién es Javier Cudeiro
Javier Cudeiro es médico de formación y se ha convertido en uno de los neurocientíficos más destacados de España. Es responsable del laboratorio NEUROcom de la Universidade da Coruña, donde trabajan en la mejora motora de los enfermos de párkinson. Además, es un apasionado de la neurogastronomía y autor del libroPaladear con el cerebro.
¿Y si gana?
En el NEUROcom trabajan con un prototipo en 3D para enfermos de párkinson. Si Javier Cudeiro obtuviera el premio de 3.000 euros de Mazda, lo destinaría a mejorar ese prototipo con el objetivo de convertirlo en un modelo portátil que pudiera ser fabricado en serie.
Redacción QUO