Acaba de ser descubierto el exoplaneta gigantes más caliente del Universo. Se llama Kelt-9, es dos veces más grande que Júpiter y está 30 veces más cerca de su estrella que la Tierra del Sol. Eso hace que su temperatura, según publican en Nature expertos de las universidades de Ohio State y Vanderbilt , alcance los 4.300 grados, diez veces más que Venus, el planeta más cálido del sistema Solar y apenas unos mil por debajo del Sol.
Pero Kelt-9 es apenas una muestra de lo que esconde el universo en su evolución. En esta galería os mostramos algunas de sus más llamativas rarezas.
Son muchos los que señalan que HD 106906 b no debería existir. És 11 veces más grande que Júpiter (no tan sorprendente), pero la distancia que lo separa de su estrella es 650 veces la que nos separa del Sol y aún así alcanza una temperatura de 1.500ºC.
El segundo planeta más caliente
Antes del descubrimiento de Kelt-9, el récord lo tenía WASP-12b, que “apenas” alcanzaba los 2.250ºC y eso debido a que se encuentra 44 veces más cerca de su estrella que nosotros del Sol.
Mirar el cielo desde HD 188753 debe ser un espectáculo fascinante. Este planeta habita en un “ecosistema” de tres estrellas, eso quiere decir que orbita una estrella, que orbita otra estrella que, a su vez, orbita otra estrella. Un atardecer por tres si hay suerte.
Dicen que los diamantes son para siempre, pues 55 Cancri-e, dos veces más grande que la Tierra, durará eternamente . O casi ya que un tercio de su masa es de diamante.
A 4,5 millones de kilómetros de su estrella TrES-2b es el planeta más oscuro conocido. Apenas si refleja la luz, menos que el carbón, por lo que lo único que se ve de él es una tenue forma roja.
Su nombre “verdadero” es J1407B. Y no solo es conocido por su tamaño, 40 veces Júpiter, sino también por sus 37 anillos que se extienden unos 120 millones de kilómetros, 200 veces más que los de Saturno.
Es cierto que su nombre oficial es PSR B1620-26 b y que se encuentra a unos 12.400 años luz de distancia. Pero se le conoce mejor como Matusalem ya que es uno de los planetas extrasolares más viejos que se conocen: “nació” 12.700 millones de años atrás, apenas mil después que el Big Bang.