Hoy la NASA ha lanzado su misión Mars 2020. A bordo irá el vehículo de exploración rover Perseverance. Y este llevará una pasajera muy particular: una pequeña parte del planeta rojo que regresa a su lugar de origen
El objetivo de la misión Mars 2020 es hallar señales de vida microbiótica del pasado marciano. Y para eso el robot Perseverance de la NASA, llevará consigo un meteorito que, hasta ahora, ha estado alojado en la colección del Museo de Historia Natural de Londres.
La roca se formó hace unos 450 millones de años, y el impacto de un meteorito la liberó hace entre 600.000 y 700.000 años. Su viaje final terminó en la Tierra unos mil años atrás.
La roca fue descubierta en el desierto de Omán en 1999 y se la bautizó como Sayh al Uhaymir 008 o SaU 008. Se trata de un trozo de basalto, y contiene muchos minerales de piroxeno, olivina y feldespato.
Esta es la razón por la que ahora regresa a Marte
Como los científicos conocen tan bien esta roca, SaU 008 actuará como un testigo que permitirá comparar cualquier descubrimiento que pueda hacer Perseverance.
Esto será muy importante ya que los instrumentos a bordo del rover analizarán el entorno marciano mediante lectores de imágenes y espectroscopios láser y lo compararán con SaU 008. Si ven algo muy interesante pero que se sale de los parámetros, podría ser que los instrumentos están mal calibrados. SaU 008 les sirve como una base para reconocer que los instrumentos de abordo del Perserverance funcionan correctamente.
A partir de ahí, habrá que esperar para ver qué esconde la tierra marciana.
