Los paleontólogos han identificado más de una veintena de huevos, de unos 20 centímetros de diámetro, en un estado de conservación óptimo, agrupados, lo que sugiere la existencia de varios nidos

Un equipo internacional de paleontólogos españoles del Grupo Aragosaurus-IUCA (Universidad de Zaragoza) y portugueses (Universidad Nova de Lisboa) excavan una extensa área de nidificación de dinosaurios de hace 68 millones de años, en el término municipal de Loarre (Huesca).
Los huevos, esféricos y de unos 20 centímetros de diámetro, han aparecido agrupados, lo que sugiere que pertenecen a varios nidos. Un análisis preliminar apunta que pertenecen a dinosaurios saurópodos titanosaurios, unos herbívoros cuadrúpedos de largas colas y cuellos, que podrían alcanzar los 20 metros de longitud.
«Tras recorrer el mundo entero estudiando huevos de dinosaurio en cinco continentes, resulta que uno de los yacimientos más importantes estaba en la sierra en la que jugaba de pequeño con mis dinosaurios de plástico”
Los titanosaurios, dinosaurios herbívoros de gran tamaño, poblaron la Tierra hacia el final de la Era Mesozoica, entre 120 a 70 millones de años atrás. Esta familia agrupa especies de diferentes tamaños, entre los que se encuentran los animales terrestres más grandes que hayan existido.
Miguel Moreno-Azanza ha declarado que “tras recorrer el mundo entero estudiando huevos de dinosaurio en cinco continentes, resulta que uno de los yacimientos más importantes estaba en la sierra en la que jugaba de pequeño con mis dinosaurios de plástico”.
 Este descubrimiento permitirá estudiar aspectos de la biología reproductiva de los últimos dinosaurios no avianos de Europa, entre ellos como construían los nidos, o si las hembras se agrupaban para anidar al mismo tiempo.   

Uno de los huevos extraídos de la roca

La excavación está siendo realizada por un equipo formado por investigadores de la Universidad Nova de Lisboa y Museu de Lourinhã, Portugal, y del Grupo Aragosaurus-IUCA de la Universidad de Zaragoza. Se enmarca en el contexto de un proyecto de investigación sobre la reproducción de los dinosaurios financiado por la Fundação para la Ciência y la Tecnología de Portugal, liderado por Miguel Moreno Azanza, paleontólogo de origen oscense que se encuentra actualmente trabajando en la Universidad Nova de Lisboa.