Cuando las personas solteras tienen relaciones fuertes de amistad no le dan tanta importancia a encontrar pareja, según un estudio reciente

Según un nuevo estudio publicado en la revista  Journal of Social and Personal Relationships, las personas solteras que están más satisfechas con su núcleo de amigos tienen menos interés en encontrar una pareja sentimental, y valoran más las relaciones de amistad que las relaciones románticas.

En España el número de solteros aumenta cada año. En 2005 representaban el 32% de la población y en 2019 ya eran el 36%, un total de 14,4 millones de personas.

Elyakim Kislev, investigador en la Universidad Hebrea de Jerusalén y autor del estudio, calcula que, del total de solteros del mundo, alrededor del 20% no está interesado en encontrar pareja. «Creo que es importante estudiar cómo son sus vidas ya que hay nuevas comunidades de solteros, nuevas formas de vida y nuevos patrones de comportamiento», afirma Kislev.

«Las personas que llevan solteras mucho tiempo tienen redes sociales más grandes, lo que les ayuda a reducir su sentimiento de soledad»

El estudio consistió en analizar los datos del Pairfam (Panel de análisis alemán de relaciones íntimas y dinámicas familiares). Este estudio lo llevan a cabo diferentes universidades alemanas con el objetivo analizar los estilos de vida de las familias del país. Para recopilar los datos se encuesta a más de 12.000 personas y se les pregunta sobre cuánto les gustaría tener pareja, cuánta vida social tienen, o el nivel de importancia que le dan a la amistad.

El estudio Pairfam

Analizando los datos del Pairfam, Kislev descubrió que de entre todos los solteros, aquellos que no estaban interesados en buscar pareja eran los que más importancia daban a la amistad y los que tenían mayor nivel de satisfacción con sus amistades.

«Querer tener una pareja está bien siempre que esté en línea con nuestros objetivos y no con los de nuestra familia o la sociedad que nos rodea»

Lo contrario sucedía con las personas solteras que sí deseaban tener una relación romántica: estaban menos satisfechas con su vida social y le daban menos importancia a la amistad.

Según Kislev, estos resultados desafían la idea errónea de que las personas solteras no quieren tener pareja porque tienen problemas para relacionarse socialmente. Kislev afirma que también es posible que los solteros con poco deseo de tener relaciones románticas, transfieran las responsabilidades que asume la familia nuclear a sus redes de amigos.