La carrocería familiar como la del Peugeot 308 SW híbrido enchufable amenazan con desbancar a los idolatrados SUV

Cada marca los llama de una manera, station wagon, break, touring, familiar… Hay quien los conoce como ranchera y los que se refieren a ellos, simplemente, como familiares. El Peugeot 308 SW (station wagon) híbrido enchufable es uno de los últimos modelos que ha llegado al mercado con esta carrocería familiar que amenaza con desbancar a los omnipresente SUV o todocaminos por muchas razones.

  1. La capacidad del maletero es la misma o mayor que la de los Sport Utility Vehicle. Con todos los asientos ocupados, en el Peugeot 308 SW es de 548 litros (los SUV 3008 y 5008 tienen 395 y 780 litros, respectivamente).
  2. El segundo aspecto determinante es que la aerodinámica de las rancheras es mejor que la de los SUV. Y esto se traduce en un consumo más bajo porque los familiares ejercen menos resistencia al avance en el aire. A ello se unen las nuevas tecnologías híbridas enchufables que en ambos casos contribuyen a que el gasto de combustible sea menor. Los SUV también son más sensibles a posibles inercias indeseadas por su mayor altura y peso. La carrocería familiar como el 308 SW va más pegada al suelo.
  3. El tercer punto a considerar a favor de los station wagon es su estética. Imbatible.

Los familiares no eran tan bonitos

Cuando empezó la fabricación de automóviles en serie en la primera mitad del siglo XX, los coches familiares no eran, como ocurre ahora, modelos derivados de uno ya existente. Su concepción partía de cero. Eran altos porque muchos de sus compradores trabajaban como comerciantes. No importaba la estética, pero sí la capacidad de carga. La crisis del petróleo de 1973 fue el revulsivo para estos coches. Los diseñadores de las marcas se las ingeniaron para que consumieran menos bajándoles el techo. Lo que pretendía ser una medida de ahorro energético se convirtió en uno de los mayores aciertos para dotar de atractivos a los familiares, ¿o deberíamos decir break o station wagon?

Un cambio de tendencia

Hasta 1998 Peugeot llamaba break a las carrocería familiares. Ese año, decidió cambiarles el nombre y empezó a llamarlas SW (station wagon).  El Peugeot 206 SW fue el primero de esa nueva denominación. El coche enseguida fue un bombazo. Se vendieron cinco millones de unidades y abrió el camino a una revolución en el mundo de los station wagon (SW) que se consolidó con el lanzamiento del Peugeot 307 SW.

Con el 307 SW cambiaron muchas cosas porque este tipo de modelos abandonó definitivamente su vocación comercial para apostar por las familias. Las campañas de publicidad del momento destacaban el enorme techo acristalado que permitía a los pasajeros de las plazas traseras ir viendo el cielo mientras se desplazaban.

El Peugeot 308 SW híbrido enchufable probablemente sea otro de esos éxitos que la marca desea y que no siempre consigue como ocurrió con el Peugeot 1007 en la primera década del siglo XXI. De momento, el 308 en su versión berlina ha sido elegido como el mejor coche del 2022 por el Women’s World Car of the Year, un jurado internacional presente en los cinco continentes. Tiene la etiqueta cero de la DGT, puede moverse en modo eléctrico 66 km y ofrece todo ese derroche tecnológico al que últimamente acostumbran las marcas. Y, no, no es un SUV… afortunadamente 😉.