La precisión de los mapas de la Guía Michelin permitió a los soldados aliados moverse sin error por carreteras desconocidas

Hoy la Guía Michelin es un referente gastronómico, pero su papel en la historia de una Europa libre fue decisivo durante la Segunda Guerra Mundial.

Cuando nació en 1900 apenas tenía pretensiones. Su misión era la de proporcionar a los conductores franceses del momento una lista de mecánicos, médicos, curiosidades… y planos de ciudades. Su precisión era tal, que se convirtió en un manual de referencia para los transportistas profesionales.

La deriva bélica europea en la primera mitad de siglo XX no impidió que la Guía Michelin se siguiera editando y mejorando sus contenidos. Tanto que se convirtió en una pieza clave en la batalla de Normandía.

El Día D y una valiosa colaboración

El 6 de junio de 1944 alrededor de 150.000 soldados llegaron a la costa de Normandía. Por aire, en paracaídas. Por mar, en barcos de guerra. La operación fue preparada con todo detalle. En un solo día, los aliados controlaron las cinco playas que se había marcado como objetivo: Utah y Omaha, debían ser tomadas por los estadounidenses; Sword y Gold, por los británicos; y Juno, por los canadienses. Tres nacionalidades diferentes en un país que probablemente muchos de ellos no habían pisado jamás.

Los soldados ingleses, estadounidenses y canadienses recurrieron a un arma secreta para orientarse: la Guía Michelin.

La conquista fue un éxito. Por delante quedaba otro desafío: liberar ciudades que ni se conocían, ni se sabía muy bien dónde estaban, ni se tenía idea de cómo llegar a ellas. Los mapas aéreos daban una idea de su ubicación, pero faltaban muchos años para que los sistemas de navegación satelital como Galileo fueran una realidad. Los soldados ingleses, estadounidenses y canadienses recurrieron entonces a un arma secreta para orientarse: la Guía Michelin.

El ardiz no fue casual. Casi un año antes del Día D, el estado mayor estadounidense había contactado con la dirección de Michelin para pedirles una actualización de la Guía. La última edición disponible era de 1939. Michelin tomó entonces cartas en el asunto. La operación terminó con la liberación de los territorios de Europa occidental ocupados por la Alemania nazi y el principio del continente que hoy todos conocemos.