Las temperaturas medias de la Península Ibérica han aumentado desde 1975 unos 0,5ºC por década, casi tres veces que la media global. Para finales de este siglo, por causa del calentamiento global, España podría sufrir una elevación media de hasta seis grados en verano y entre dos y tres en invierno. Así lo asegura el informe Clima en España: pasado, presente y futuro, de la red Clivar-España.
Según uno de sus responsables, Ileana Bladé, investigadora de la Universidad de Barcelona, el origen antropogénico (causado por el ser humano) es “muy evidente”: el aumento ha sido muy acusado en las últimas tres décadas, mientras que en la actualidad las temperaturas medias están estancadas.
En cuanto a las precipitaciones, el estudio refleja que la media anual de las tres últimas décadas (las que mejor delatan el calentamiento global) ha disminuido de forma significativa en relación a los años 60 y 70, y la tendencia podría seguir para las próximas décadas.
Redacción QUO