El llamado pez bruja es una criatura de aspecto realmente extraño e inquietante. Se trata de una especie de lamprea que se alimenta de la carne de otros peces muertos, gracias a as puntiagudas espinas que posee en la boca y a sus dientes.
Se sabe que esta especie existe desde hace unos 500 millones de años, pero se conservan muy pocos restos fósiles de la misma. Los especialistas explican que el pez bruja es como una especie de salchicha flotante. Una bolsa de piel rellena de músculos, pero que carece de tejidos óseos en su interior, lo que dificulta que puedan fosilizar sus restos.
Pero, investigadores de la Universidad de Chicago acaban de descubrir en el Líbano, el fósil extraordinariamente conservado de uno de estos peces, cuya antigüedad ha sido datada en unos 150 millones de años.
Otra de las peculiaridades del pez bruja es su forma de defenderse. Este pez segrega una especie de limo o baba que, al entrar en contacto con el agua, aumenta de tamaño, y que obstruye la boca de los depredadores que le atacan.
Pues bien, en el fósil hallado en Líbano, los investigadores han detectado restos de queratina, uno delos componentes de esa baba. Lo que corrobora que hace 100 millones de años, esta especie ya había desarrollado su característico mecanismo defensivo.
Fuente. LiveScience.
Vicente Fernández López