Al menos 30 grandes ballenas han muerto en el oeste del Golfo de Alaska desde el pasado mes de mayo en extrañas circunstancias. Los motivos son completamente desconocidos. Según ha declarado la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA, por sus siglas en inglés), este es el primer «evento de mortalidad completamente inusual» de grandes ballenas que se ha visto en el estado. No son las únicas, junto a ellas, según han informado las autoridades de la provincia canadiense de Columbia Británica, araos comunes (Uria aalge) han seguido la misma suerte.

Aún se desconocen las causas de estas misteriosas muertes. Por ello, los investigadores están tomando muestras con el fin de hacer pruebas de biotoxinas, virus y bacterias, pues según la NOAA «la hipótesis principal es que esta situación se debe a la floración de algas nocivas que se están extendiendo hasta la costa oeste de este año». Según explica Teri Rowles, científico de la NOAA a Alaska Daily News, «las biotoxinas serán unas de las principales prioridades, pero no la única prioridad que estaremos evaluando para determinar o descartar si es la causante principal de la muerte que está siendo investigada y de estas mortalidades, tanto en Canadá como en Estados Unidos».

Hasta ahora solo se ha realizado la autopsia a una de estas ballenas, ya que el resto de cuerpos no han podido ser recuperados.

Fuentes:

alaskafisheries.noaa.gov | adn.com |

Redacción QUO