¿Veis una mancha azul púrpura en el mapa? Pues trae de cabeza a los científicos desde hace dos años. La situación que está ocurriendo allí es muy similar a la película El día después de mañana, donde el clima mundial cambia en cuestión de días. A pesar de que hemos tenido uno de los años más cálidos de la historia, ese lugar registra una tendencia de enfriamiento muy pronunciada, tanto que está batiendo el récords en algunos puntos.
La denominan «la mancha del Atlántico». Esta zona está ubicada en el Atlántico Norte. Su superficie es más fría de lo normal y completamente opuesta al calentamiento del Pacífico provocado por el fenómeno de El Niño. Estos contrastes han provocado grandes cambios en todo el ecosistema. De hecho, algunos expertos afirman que este calentamiento tan pronunciado ha podido ser el responsable de huracanes y tifones sobre todo el Pacífico e, incluso, contribuir a la sequía de California, el impacto negativo en la industria de salmón e incluso la «mudanza» de los tiburones tropicales, que han migrado a aguas más al norte con el fin de encontrar un lugar más acorde con sus necesidades.
Esta mancha «helada» del Atlántico está muy cerca de Groenlandia. Según creen los investigadores, el derretimiento de hielo de esta zona es lo que está provocando esta anomalía de frío. Los científicos consideran que existen motivos más que suficientes para preocuparse por estos cambios tan radicales. La mayoría de ellos considera que esto se debe al cambio climático.
Otra de las teorías, es que el hielo que se está derritiendo en Groenlandia está alterando la circulación normal del Océano Atlántico, lo que se conoce como Circulación Meridional de Retorno del Atlántico Norte (AMOC, por sus siglas en inglés). La otra corriente principal en la AMOC es un flujo de retorno de agua fría profunda que corre hacia el sur desde los polos y se dirige hasta el trópico. Esta corriente tiene impactos bastante notables sobre nuestro clima en todo el mundo, ya que el calor y el frío impulsados por la corriente se transfieren a la atmósfera y ayudan a impulsar nuestros patrones del clima.
Los impactos, aunque no tendrían nada que ver con la película, podrían ser bastante dramáticos. La pérdida de la circulación normal del océano podría ocasionar cambios drásticos en nuestros patrones climáticos, y la continua pérdida de hielo en Groenlandia podría generar un continuo aumento en el nivel del mar, lo que amenaza a las ciudades costeras alrededor del mundo.
Fuente: cnnespanol.cnn.com
Redacción QUO