Se llama Lithodytes lineatus y es una rana muy poco común. Procedente del Amazonas, es capaz de hacerse pasar a la perfección por una hormiga cortadora de hojas Atta cephalotes. ¿Su fin? engañar a estos insectos para que le hagan de guardaespaldas mientra pone huevos en su hormiguero. Según han descubierto los investigadores, lo hace gracias a la segregación de una sustancia química.

Lo cierto es que el Amazonas hace honor a su reputación como ‘laboratorio de la evolución’ ya que está lleno de criaturas con adaptaciones de lo más curiosas que les permiten dar esquinazos a los depredadores o tener que matar para sobrevivir. Es el caso de muchos parásitos invertebrados, que producen sustancias químicas que imitan a las de sus anfitriones, lo que les permite infiltrarse sin riesgo.

Aunque esta técnica es poco frecuente en los invertebrados, los científicos del Instituto Nacional de Investigaciones de la Amazonia (Brasil), empezaron a sospechar de que las Lithodytes lineatus pueden secretar sustancias químicas que son muy parecidas a las feromonas que usan para comunicarse las hormigas Atta cephalotes cuando observaron que estas jamás eran picadas por las hormigas cuando entraban en sus nidos para poner los huevos.

Para comprobarlo, los investigadores colocaron Lithodytes lineatus y otras cuatro especies de ranas del Amazonas en un recipiente de cristal con algunas hormigas cortadoras de hojas. Observaron que mientras el resto de ranas trataba de huir de esta terrible situación, la Lithodytes lineatus permanecía completamente tranquila. Además, todas fueron picadas por las hormigas menos esta especie.

Fuente: iflscience.com

Redacción QUO