El gavilán pescador es un depredador con una técnica muy precisa. Sus principales presas son peces, a los que divisa desde el aire y captura zambulléndose en el agua con sus garras por delante. Se da el caso de que esta ave es, junto con el búho, la única que posee un dedo reversible, lo que le permite apresar a sus víctimas con más fuerza. Una vez que las ha atrapado emprende de nuevo el vuelo, llevando (tal y como se aprecia en la imagen) a los peces que ha capturado con la cabeza hacia delante, lo que disminuye el rozamiento del aire. En ocasiones, la presa queda tan enganchada a su garra que el ave no puede librarse de ella en el caso de que pese demasiado.
Vicente Fernández López