Los perros, cuando orinan, no solo están haciendo una necesidad fisiológica. También pueden estar marcando su terreno y dejando mensajes invisibles para otros ejemplares. Teniendo en cuenta esos datos, cobra especial sentido el comportamiento de algunos perros al orinar.
Cuanto mayor es el ángulo en el que levantan su pata, mayor será la altura a la que alcance el chorro de orina. Por ese motivo, un equipo de la Universidad de Cornell ha intentado averiguar por qué los animales más pequeños se esfuerzan por levantar su pata en un ángulo más grande que los perros de más tamaño
Y la conclusión a la que han llegado es que lo hacen para mentir sobre su tamaño. Así, cualquier otro perro que penetre en su territorio, al ver las marcas que deja la orina, creerá que allí vive un ejemplar mucho más grande. Este tipo de comportamiento ha sido observado en otras especies, como las mangostas, que también recurren a estrategias similares para engañar sobre su tamaño a sus competidores.
Fuente: Newscientist
Vicente Fernández López