Antes de la década de 1990, era imposible encontrar el Persimón en ninguna frutería. Y era debido a que no existía, porque se trata de una nueva fruta, inventada por científicos españoles. En esencia, el Persimón es una variedad de caqui, un fruto originario de China y Japón, que llegó a España en 1870.
El caqui es dulce y blando, pero no a todo el mundo le gusta, porque después de comerlo provoca una especie de sensación aspera en la boca. Es debida que esta fruta contiene taninos, un tipo de sustancias capaces de coagular algunas proteínas presentes en nuestra mucosa bucal. Para eliminarlas hay que esperar a que el caqui esté muy maduro. Pero eso implica también que esté ya demasiado blando, lo que provoca que sea muy sencillo dañarlo al transportarlo.
Pero investigadores del Departamento de Fruticultura del Instituto Valenciano de Investigaciones Agrarias, solucionaron ese problema creando el Persimón, que es una variedad mejorada del caqui que no contiene taninos. Y lo han logrado introduciendo los caquis en una cámara de etanol, un gas que elimina dichas sustancias.
Ahora, el Persimón está de moda. En el año 2000 se cultivaron 21.000 toneladas, pero el año pasado se alcanzaron las 300.000. ¿Aún no lo habéis probado?
Fuente: SINC.
Vicente Fernández López