La Ría de Arousa, en Pontevedra, ya tiene diez nuevos habitantes. Una decena de caballitos de mar, de la especie Hippocampus guttulatus o caballito de mar narizón (la más abundante en nuestras aguas) han sido liberados por científicos del CSIC en una iniciativa pionera a nivel mundial.
El proyecto, coordinado por Miguel Planas, busca conocer más sobre el comportamiento en libertad de esta especie, sus hábitos reproductivos, su esperanza de vida o su edad de madurez sexual. Pero también pretende comprobar si son capaces de adaptarse al medio natural tras haber vivido en un laboratorio. Y cómo lo logran.
Planas, científico del Instituto de Investigaciones Marinas de Vigo, cuenta que «al principio el seguimiento será muy intenso, sobre todo porque ahora empieza la época de reproducción. Esto nos permitirá saber cómo se relacionan y si tienen crías o no. La investigación nos permitirá estudiar las poblaciones naturales, de las cuales se desconocía practicamente todo».
Para ello cuenta con estos «espías» que los investigadores podrán detectar facilmente gracias a unos marcadores subcutáneos. Así podrán también comprobar uno de los grandes mitos: la fidelidad de los hipocampos. Y es que «en principio son monógamos – asegura Planas – pero hemos visto que al menos en esta especie, hay una flexibilidad muy grande dependiendo si uno es soltero, de a quien tenga a su alrededor, puede haber cambios de parejas para asegurar la descendencia».
Redacción QUO