“La función del canto es doble”, sigue Soler. “Se está transmitiendo un mensaje que, por un lado, se utiliza para atraer hembras, y por otro, para expulsar de las proximidades a los machos rivales. La misma balada les está diciendo a las hembras ‘soy un ejemplar fuerte, ven a aparearte conmigo’; mientras que a los machos les esta comunicando algo distinto: ‘soy un tío fuerte, si te acercas por aquí, tendrás que luchar conmigo”. Pero, ¿qué hace a unos pájaros más tímidos y a otros más audaces?
Genética vs. ambiente
En 2008, un grupo de científicos liderados por Piet Drent, del Instituto de Ecología de Holanda, y Niels Dingemanse, de la Universidad de Groningen, estudió la importancia de los genes en la personalidad de un grupo de miles de herrerillos (Parus major). En cuatro generaciones, estos expertos llegaron a conseguir que nacieran individuos más tímidos o más valientes por medio de la selección de estos rasgos en sus progenitores.
Por otra parte: “Las distintas poblaciones de una misma especie, e incluso los individuos que conviven dentro de una misma población, están sujetos a distintas presiones selectivas, según factores como la variedad de condiciones de disponibilidad de alimento, la presencia de depredadores, de hembras, competidores, etc. Así que un rasgo de personalidad que puede ser poco eficaz en términos de supervivencia o reproducción en un contexto determinado puede llegar a ser vital en otro”, termina Soler.
De hecho, un estudio de Claudia Mettke-Hofmann de la Universidad de Moores (Reino Unido) realizado en dos especies del género Sylvia –la curruca cabecinegra y la curruca mosquitera– lo constata. Esta bióloga estudió la manifestación de dos tipos de personalidad habituales en estas especies: la de los exploradores y los neofóbicos en dos épocas diferentes del año. Resultó que los ejemplares de la cabecinegra, que no es migratoria, mantenían su personalidad sin cambios. Pero los de la mosquitera, que sí lo es, registraron un crecimiento en su “carácter explorador” para adaptarse a la nueva situación
Redacción QUO