La Tierra se calienta y las anomalías climáticas empiezan a dejar de ser anomalías

En Febrero de este año, la Antártida tuvo su récord: en la base Esperanza, una estación científica, la temperatura alcanzó los 18,3 grados centígrados, la más elevada desde 1961. El pasado mes de Julio el protagonista fue el Ártico. Un pueblo de Siberia alcanzó el récord de máxima temperatura con 2o grados por encima de lo normal. Los termómetros alcanzaron los 38ºC. Ahora es el Valle de la Muerte (EE.UU), un inhóspito lugar del lejano Oeste americano, el que arde: alcanzó los  54,4ºC.

La temperatura media de la Tierra ya está 1,0 °C por encima del valor de la era preindustrial (1850-1900) y, según los expertos, en el período 2020-2024, es probable que la temperatura de prácticamente todas las regiones, salvo en partes de los océanos meridionales, sea más cálida que en el pasado reciente.

Este vídeo de la NASA muestra que vivimos en la década más cálida de la historia

El último récord batido ha sido en un inhóspito lugar del Oeste americano, habitado aún por 31 personas de la tribu india de los tumbishas: El Valle de la Muerte. La temperatura alcanzada ha sido la mayor registrada en el último siglo, 54,4ºC.  Mar Gómez, doctora en Físicas y responsable del área de meteorología de eltiempo.es. explica el caso del Valle de la Muerte,  qué tiene que ver el Cambio Climático y por qué vamos a seguir batiendo récords.

¿Cuál es el clima habitual de esta zona geográfica?

Este Parque Nacional de El Valle de la Muerte es conocido por sus extremos y es uno de los lugares más calurosos de la Tierra, junto con Oriente Medio. Tiene un clima desértico subtropical y cálido con veranos extremadamente calurosos, inviernos cortos y suaves y escasas precipitaciones.

Las temperaturas en verano pueden superar a menudo los 49ºC a la sombra, con mínimas nocturnas de más de 30ºC. En contraste con los extremos del verano, el invierno y la primavera son agradables con noches frescas que solo ocasionalmente registran heladas. Las elevaciones más altas son más frías que el valle bajo y las temperaturas bajan de 2-3ºC cada 300 metros de altura.

Pero también es conocido por ostentar el título de ser el lugar donde se ha medido la temperatura más alta desde que tenemos registros. Ocurrió en julio de 1913, en Furnace Creek, y se registraron 56.7ºC. Algunos científicos creen que las medidas de instrumentación pudieron no ser las más adecuadas en ese momento por lo que no guardan consenso con este dato, pero de momento la OMM lo mantiene como válido.

¿Por qué se ha dado en este lugar el récord de temperatura?

Las altas temperaturas que se registran aquí pueden atribuirse a un conjunto de factores geográficos y de orografía. Por ejemplo, la región del valle sufre un importante calentamiento solar debido a la escasa cobertura vegetal y dominancia de tierra, roca o arena, y especialmente durante el verano.

Debido a la localización geográfica, entre cuatro cadenas montañosas, el aire caliente sujeto a un recalentamiento continuo se queda atrapado por las paredes de las montañas en el interior y fondo del valle. Ese aire caliente estancado junto con la insolación diaria hace que la temperatura se eleve alcanzando valores extremos.

Además, la llegada de aire cálido de otras regiones, sobre todo al sur y este y los vientos cálidos de montaña, como los resultantes del efecto foehn, hacen que las masas de aire que llegan a esta región lo hagan especialmente recalentadas.

¿Estas temperaturas permiten la supervivencia de las especies?

A pesar del intenso calor y la escasez de lluvias, hay una considerable biodiversidad ya que las flores, regadas por el deshielo, cubren cada primavera el suelo de algunas regiones de este Parque Nacional. Existen halcones y burros salvajes y cuenta con algunos manantiales de agua.

En cuanto a seres humanos, viven 31 personas según el censo de los Estados Unidos, la mayoría miembros de la tribu india de los tumbishas que trabajan en el complejo turístico del parque. 

¿Estas altas temperaturas pueden provocar «desastres» en la naturaleza?

Lo que provocan las altas temperaturas asociadas al cambio climático global es una alteración de los patrones atmosféricos, deshielo en las regiones polares, subida del nivel del mar, aumento de las olas de calor, entre otros.  En concreto las altas temperaturas locales, ayudan a la evaporización y desertificación del terreno si no se producen precipitaciones significativas.

¿Cómo influye el cambio climático en la elevación de las temperaturas?

El cambio climático que estamos viviendo es un calentamiento global, es decir las temperaturas han ido aumentando y seguirán haciéndolo en las próximas décadas. Las altas concentraciones de gases de efecto invernadero provocaron desde la Revolución Industrial que aumentara la temperatura del planeta. Estos gases como el dióxido de carbono, el metano o el ozono son muy eficientes absorbiendo el calor y en un equilibrio justo son beneficiosos y permiten mantener la temperatura en un valor óptimo para el desarrollo de la vida en la Tierra. Sin embargo, la industrialización y el tráfico han elevado estas concentraciones haciendo que absorban demasiado calor y que la temperatura media global aumente.

En España, ¿cuál ha sido la temperatura más extrema hasta el momento?

En España, en lo que llevamos de año el valor más elevado se ha dado con 45,7ºC de Vélez-Málaga el día 2 de agosto. El valor más alto de nuestros registros se alcanzó en 2017 en Córdoba aeropuerto con 47.3ºC.