Todos estos animales son adultos bien formados de su especie y, sin saberlo, flamantes portadores del título “el más pequeño entre los…” mamíferos, camaleones, primates… La mayoría de ellos han evolucionado en climas templados y muchos habitan únicamente en ciertas islas, aún no descubiertas por posibles depredadores.
A nuestros ojos aparecen adorables y enternecedores, probablemente porque los suyos tienen un tamaño proporcionalmente mayor que el resto del cuerpo, para seguir siendo funcionales. Su existencia se nos ha revelado en los últimos años, gracias a la exploración de zonas remotas y la sofisticación de los instrumentos de trabajo. Sin embargo, los científicos esperan nuevas sorpresas, que mantendrán abierta la competición por los primeros puestos en el reino de los centímetros y milímetros. Permaneced bien atentos.
¿Quién lo identificaría sin lupa entre las gorgonias? Dos centímetros mide el caballito de mar pigmeo de Denise.
Además de resultar difícil de localizar, el Brookesia micra adapta su tonalidad al entorno. Lo raro es que los científicos que lo descubrieron en Madagascar, junto a otras tres nuevas especies de camaleón, lograran verlo.
El campeón de los mamíferos mínimos conocidos es el murciélago Craseonycteris thonglongyai. Vive únicamente en cuevas del SE de Thailandia y sus alas están adaptadas para suspenderse en el aire.
Como su cuerpo tiene mucha superficie en proporción a su pequeño tamaño, el calor escapa por ella con mucha facilidad. Para contrarrestar ese efecto y mantenerse caliente, la musarañita Suncus etruscus debe comer constantemente.
El primate más “chico” que conocemos también es oriundo de Madagascar: el lémur ratón de Madame Berta pesa unos 35 gramos.