En España se consumen aproximadamente unas 1700 toneladas de mango por año. Pero es muy poco lo que sabemos de esta fruta tropical originaria de la India.
Un nuevo estudio, realizado por la Texas AgriLife Research, ha demostrado en el laboratorio, que el mango previene y aún detiene la actividad de células cancerígenas en el pecho y el colon.
Para la investigación se probó qué impacto tenían los polifenoles (sustancias naturales de las plantas, en algún momento fueron conocidas como la vitamina P) en cáncer de colon, pecho, pulmón, próstata y en leucemia. Pese a que mostró ser efectiva para todos ellos, el índice fue sorprendentemente alto para los dos últimos tipos.
“Hemos encontrado – asegura la investigadora Susan Talcott – que no todas las líneas celulares son igualmente sensibles a un agente anticancerígeno. Pero el cáncer de colon y de pecho experimentaron apoptosis (muerte celular programada). Así mismo cuando probamos qué repercusión tenían los poplifenoles del mango tanto en las células del colon, como en las del cáncer de colon, el mango solo dañaba a las células cancerígenas”.
El estudio demostró que el ciclo celular (la división celular), se interrumpía. Este hallazgo también es de vital importancia ya que podría indicar un mecanismo que permita “preveir o detener el cáncer” asegura Talcott.
Redacción QUO