Hay muchos tipos, todos relacionados con trastornos circulatorios en el cerebro, por problemas en él u ocasionados en otra parte del organismo. Se sabe poco, pero es frecuente hallar antecedentes familiares, lo cual da pistas.

Dependiendo de la zona cerebral donde se produce el trastorno, esta cefalea llega sola, “avisa” con un “aura”, o se acompaña de otros síntomas, como disfunciones visuales, hormigueos…

Enviada por Judith Ibáñez, en Facebook

Redacción QUO