Hoy se puede decir que la investigación contra el cáncer ha dado dos nuevos pasos. Por una parte, de nuevo se demuestra que las matemáticas pueden ayudar a combatir el cáncer y salvar vidas. Así lo demuestra una investigación publicada en la revista Science Translational Medicine por investigadores de la Universidad del Estado de Ohio (EEUU). Los científicos han creado una ecuación matemática que permite calcular las dosis de radiación para pacientes con cáncer con mayor precisión que los métodos antiguos y ayudará a mejorar las terapias de radiación.
El equipo, dirigido por Jian Wang, asegura que la nueva ecuación es válida tanto para las dosis bajas como las altas y calcula la cantidad de daño sub-letal a las células. Experimentos tomados de estudios previos –los cuales midieron los efectos de diferentes dosis de radiación en células cultivadas en el laboratorio y en animales– confirman que la nueva ecuación predice con precisión los efectos exterminadores de la radiación a través de la gama completa de dosis.
Más de la mitad de las personas con cáncer es tratada con terapia de radiación, capaz de atacar pequeñas áreas invadidas con células malignas. Sin embargo, una exposición demasiado fuerte puede dañar tejido sano.
Por otro lado, el director del área de Biomedicina del Hospital Vargas de Caracas (Venezuela), Jacinto Convit (de origen español), ha desvelado que está obteniendo buenos resultados en una vacuna que su equipo ha desarrollado contra el cáncer de mama, de estómago y de colon.
Se trata de una «autovacuna», según lo califica el investigador, que se adapta a cada paciente y que se administra en tres dosis con 6 meses de separación. De los 23 pacientes con los que ha experimentado, solamente dos no han respondido al tratamiento, quizá porque uno es diabético y el otro ya recibió quimioterapia. Convit aún no ha publicado los detalles de sus ensayos clínicos, no obstante.
Redacción QUO