Aunque raro (afecta solo a 2.000 personas al año) el cáncer de ojo es devastador ya que se extiende rápidamente al hígado y los pulmones y puede afectar a gente de cualquier edad. Al parecer la piel clara y la exposición solar serían podrían ser una causa importante.

Entre los distintos tipos de cáncer de ojo, Scott Oliver, profesor de la Universidad de Colorado, se centró en el melanoma coroidal, el más común. Habitualmente este tipo de cáncer es tratado con una técnica llamada braquiterapia que consiste en colocar los isótopos radiactivos directamente en la zona a tratar. La técnica ofrece algunas ventajas respecto a la tradicional radioterapia externa. Con la braquiterapia el tumor se trata con dosis muy altas de radiación localizada, con lo que se reduce la probabilidad de daño innecesario a los tejidos sanos circundantes.

En el cáncer de ojo, la braquiterapia se prolonga durante una semana pero deja a la mitad de los pacientes ciegos de un ojo. Oliver ha descubierto una forma de reducir notablemente estas consecuencias. “La radiación – explica Oliver – daña los vasos sanguíneos y los nervios detrás del ojo. En tres años, el paciente es legalmente ciego de ese ojo. Para prevenir esto recurrimos al aceite de silicona (habitualmente utilizado en desprendimiento de retina) hace de pantalla a gran parte de la radiación. No es necesario bloquear toda la radiación, ya que el ojo resiste pequeñas dosis.”

Los hallazgos fueron publicados en la revista especializada Archives of Ophthalmology, y podrían revolucionar el modo en el que se trata este tipo de tumor. Hasta el momento Oliver ha probado esta técnica en ojos de cadáveres y probado el aceite de silicona en animales sin encontrar efectos adversos. “En estos momentos podemos embarcarnos en las pruebas clínicas. Hasta ahora solo podíamos salvar la vista a la mitad de los pacientes, con este tratamiento lo haremos mucho mejor en el futuro.”

Juan Scaliter