Una adolescente de 14 años, que vive en Zhejiang, China, dijo que había estado estreñida durante cinco días, no podía comer y tenía dolor de estómago. Una tomografía computarizada reveló que había alrededor de 100 «sombras esféricas inusuales» en el abdomen de la niña, según Asia One.
Después de hablar con la adolescente sobre lo que había comido recientemente, los médicos concluyeron que las sombras inusuales en el escáner eran en realidad perlas de té de burbujas no digeridas, que generalmente se hacen con almidón de tapioca. Aunque la niña afirmó haber consumido solo un té de burbujas cinco días antes, sus médicos dijeron que habría necesitado consumir mucho más que esto para causar sus síntomas.
¿Qué es el té de burbujas o Bubble Tea?
El Bubble Tea, o en su traducción té de burbujas, es una bebida con base de té, a la que se le añaden unos toppings. Éstos pueden ser bolitas rellenas de zumo que explotan en la boca, gominolas con textura gelatinosa, o perlas de tapioca. Estas últimas son las más habituales desde su origen en Taiwan, a finales de 1980, cuando una tienda de tés se atrevió a añadir perlas de tapioca a sus productos.
Comer muchas perlas de tapioca podría causa estreñimiento. La tapioca es un alimento muy rico en almidón que está hecho principalmente de carbohidratos. Por sí misma, la tapioca probablemente no cause estreñimiento significativo, pero las bolas suelen contener otros aditivos que pueden contribuir al estreñimiento. En particular, un aditivo llamado goma guar puede jugar un papel en causar problemas digestivos ya que es una fibra que ayuda a mantener las bolas juntas y las hace más pegajosas.
Sin embargo, lo sorprendente es que la tapioca, la goma guar y otros ingredientes que se usan normalmente en las bolas de tapioca no deberían aparecer en la prueba que le realizaron a la paciente. Estos ingredientes no son radiopacos, lo que significa que no aparecen en los rayos X o en las tomografías computarizadas. Posiblemente se utilizara otro tipo de aditivo que las hizo visibles y difíciles de digerir.
Así que podemos concluir que siempre que se sigan los estándares de seguridad alimentaria, no hay ningún problema con el Bubble Tea y podemos tomarlo tranquilos (sin pasarnos, claro).
Esther Sánchez