La cosa va más allá del pisar con garbo. Según ha comprobado un equipo dirigido por Sturart Brode, de la Universidad de West Scotland, la forma de caminar de una mujer puede ser un indicador de si sus orgasmos son vaginales. Al menos, para los sexólogos experimentados. En el estudio, publicado en la revista The Journal of Sexual Medicine, se pidió a voluntarias de varias universidades que rellenaran un cuestionario sobre su vida íntima. Después se las grabó en vídeo paseando por el campus y se mostraron las imágenes a un grupo de sexólogos, que no conocían los resultados del cuestionario.
Sorprendentemente, los especialistas acertaron en un 80% cuáles de las mujeres alcanzaban el clímax vía vaginal. Concretamente, eran aquellas en las que la suma de los datos relativos a la longitud de la zancada y el grado de rotación de la columna vertebral era mayor. A la hora de explicar esta relación, los autores del artículo aducen que la forma de caminar “puede reflejar cuándo el flujo de energía de las piernas a la columna, pasando por la pelvis, discurre de forma libre y sin bloqueos”.
Pilar Gil Villar