Hay un muñeco, entusiastas de la medicina y ganas de experimentar. Pero la misión de los dummies infantiles en pediatría no es la de entretener, sino contribuir a salvar vidas. Dotados de múltiples sensores y un simulador inteligente conforme a un modelo matemático, son empleados para el análisis de procedimientos. En ellos se pueden provocar crisis asmáticas, taquicardias, edemas agudos de pulmón, bronquiolitis, laringitis, paradas cardíacas y reacciones alérgicas graves, como anafilaxis.

Un software especial de reconocimiento permite al modelo responder en tiempo real a las instrucciones verbales de los especialistas y a los tratamientos que se le aplican, según explican en el Centro de Simulación del Hospital Infantil Universitario Niño Jesús. Las reacciones a un masaje cardíaco, una inyección de un determinado fármaco o cualquier otra intervención son enviadas de forma inalámbrica a una terminal que proyecta en pantalla los valores vitales para que puedan ser evaluados.

EL DATO:
100 mil euros cuesta cada uno de estos dummies infantiles.

Redacción QUO