Muchos de nosotros optamos por incorporar a nuestra dieta suplementos vitamínicos en algún momento de nuestra vida. Pero, ¿son realmente efectivos? ¿Todos?

Un grupo de expertos analizó recientemente los datos y ensayos publicados entre enero de 2012 y octubre de 2017 sobre el tema en cuestión. Tras el análisis, hallaron que muchas multivitaminas populares (como la vitamina C, la vitamina D y los suplementos de calcio) no tenían ninguna ventaja real para la salud de las personas, y que no había evidencia para pensar que pudieran reducir el riesgo de enfermedad cardiovascular, ataque cardíaco, accidente cerebrovascular o muerte temprana.

El estudio (publicado en Journal of the American College of Cardiology) fue dirigido por investigadores del Hospital St. Michael y la Universidad de Toronto.

«Nos sorprendió encontrar tan pocos efectos positivos de los complementos más comunes que la gente consume. Encontramos que tomar multivitaminas, vitamina D, calcio o vitamina C, no hace daño a la salud, pero tampoco ofrece ventajas relaes”, aseguraba el Dr. David Jenkins, autor líder del estudio.

Las vitaminas que el equipo revisó fueron A, B1, B2, B3 (niacina), B6, B9 (ácido fólico), C, D y E, así como caroteno, calcio, hierro, zinc, magnesio y selenio.

El estudio relfeja cómo algunas vitaminas son más útiles que otras. Por ejemplo, el zinc se ha relacionado con la reducción de los efectos de un resfriado, algo que la vitamina C no hace (a pesar de que siempre hayamos creído lo contrario).

La vitamina D también puede ser difícil de obtener de los alimentos, así que, ante alguna deficiencia de ella en nuestro organismo, los suplementos también pueden ser efectivos.

Además, el estudio halló que el ácido fólico y las vitaminas B con ácido fólico podrían reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares y accidentes cerebrovasculares.

En cuanto a la niacina (una forma de vitamina B3) y los antioxidantes, se asociaron con un mayor riesgo de muerte, aunque un aumento muy pequeño.

Los investigadores dicen que estos riesgos más altos podrían estar relacionados con los efectos adversos de la niacina sobre los niveles de azúcar en la sangre, o que (al ingerirlos en dosis altas) los antioxidantes pueden llegar a ser dañinos.

Los expertos también señalaron la importancia de recalcar que tomar vitaminas en ningún caso puede ser un sustituto de una dieta saludable y equilibrada.

«En ausencia de datos positivos significativos, aparte de la reducción potencial del ácido fólico en el riesgo de accidente cerebrovascular y enfermedad cardiaca, lo más beneficioso es confiar en una dieta saludable para llenarse de vitaminas y minerales», aseguró Jenkins.

«Hasta ahora, ninguna investigación sobre suplementos nos ha mostrado algo mejor que porciones saludables de alimentos vegetales menos procesados, incluyendo vegetales, frutas y nueces”, concluye.

Fuente: Science Alert

Belén Robles González