El cráneo de la imagen fue encontrado en una fosa común hallada cerca de la ciduad de Baucina, en Sicilia. En ella estaban enterrados los restos de unas cincuenta personas, cuya antigüedad aproximada es de unos 2.500 años. Pero esa calavera se encontraba situada en un lugar más elevado, y en una posición en la que parecía mirar, como si estuviera vigilando, al resto de los esqueletos.

Los investigadores creen que esa disposición se debe a que este cráneo se le concedía un estátus casi sagrado. Pero, ¿por qué? La calavera muestra una serie de deformidades y varios agujeros que fueron, con total seguridad, provocados por algún tipo de cáncer.

Dado que, según los investigadores, los antiguos habitantes de Sicilia sentían un respeto casi venerable a ciertas enfermedades (que consideraban que se debían a causas sobrenaturales), tal vez pensaron que el cráneo de esa persona (que era una mujer) poseía ciertos poderes, y lo colocaron en esa posición para verlar por el resto de los fallecidos en el tránsito hacia el más allá.

Fuente: LiveScience.

Vicente Fernández López