El llamado síndrome de la muerte súbita del lactante engloba los casos de muertes inesperadas y sin explicar de bebés aparentemente sanos. Algunos estudios aseguran que se produce un caso por cada mil nacimientos en la Unión Europea. Como ya hemos avanzado, no existe una causa clara que lo explique, aunque se han apuntado algunos factores que podrían influir. Y, ahora, un estudio realizado por investigadores de la University of Sheffield, en Reino Unido, sugiere otra: la circuncisión.
Según el autor del estudio, un bebé tiene menos de medio litro de sangre, y en la circuncisión puede perder el equivalente a la cantidad que se le extrae a un adulto en cuatro donaciones. La consecuencia es que se producen cambios en la presión sanguínea del recién nacido que afectan al funcionamiento del corazón.
El estudio ha recopilado datos de diversos países del mundo en los que se realiza la circuncisión (incluídos Estados Unidos y varios países europeos), y ha encontrado una correlación entre esta práctica y los casos de este síndrome. Es decir, que en los países en los que más se practica la circuncisión, el ratio de casos del síndrome de la muerte súbita del lactante parece ser más alto.
Por supuesto, el estudio solo confirma la existencia de una relación estadística, pero su autor asegura que el resultado es lo suficientemente revelador como para considerar a esta práctica un factor de riesgo.
Fuente: IFL Science.
Vicente Fernández López