Los resultados de un informe publicado enla revista especializada Clinical Practice and Cases in Emergency Medicine, sostienen que la muerte de un bebé de once meses ocurrida en 2015 en Denver, Colorado, se debió a causas desconocidas, pero establece la existencia de un vínculo entre el fallecimiento del niño y la presencia de marihuana en su organismo.

El niño fue ingresado después de pasar dos días con síntomas que incluían vómitos y convulsiones esporádicas. Al poco de ser hospitalizado, sufrió una parada cardiorrespiratoria, y acabó falleciendo una hora después. Los médicos certificaron que el bebé había muerto por una miocarditis, una inflamación del miocardio que provoca que el corazón no pueda bombear la sangre adecuadamente. Se trata de una afección que raramente se da en recién nacidos. Entonces, ¿qué fue lo que la provocó en este caso?

La causa más común de miocarditis es la infección de un virus llamado coxsackievirus, aunque también puede ser provocada por la presencia de hongos o parásitos. Pero las pruebas realizadas descartaron estas posibilidades. En cambio, los análisis clínicos revelaron la presencia en el organismo del bebé de restos de tetrahidrocannabinol, el principal compuesto psicoactivo del cannabis. Y, dado que la miocarditis también ha sido vinculada al consumo de drogas, los autores del estudio apuntan a que, a falta de otros datos, el cannabis podría haber influido (aunque no lo afirman de manera tajante) en la muerte del niño.

Pero numerosos especialistas consideran que estas conclusiones son bastante prematuras. ¿Por qué? Entre otros motivos, porque se desconoce como fue expuesto el bebé a la marihuana. ¿Le hicieron tragarla, se la inyectaron…? Algunos sugieren que en función de cual fuera el modo y la vía de ingesta, pueden existir muchas variables que arroje luz sobre las causa de la muerte. Y ponen un ejemplo: desde que se legalizó la marihuana en Colorado, se venden gominolas hechas con este producto, y podría darse el caso de que el niño fuera alérgico a alguno de sus componentes. De hecho, los propios autores del informe reconocen que correlación (la presencia de restos de cannabis en el organismo) no siempre significa causalidad.

Conviene también recordar que no se conoce una dosis letal de marihuana. Los experimentos realizados con animales en la década de 1970, revelaron que la sobredosis de esta sustancia tenía evidentes efectos sobre la salud de los cobayas, pero no los mataba. De hecho, todas las muertes vinculadas al consumo de esta sustancia se han debido a que la persona estaba realizando alguna actividad de riesgo (conducir, manejar maquinaria pesada…) mientras la consumía, o a que sufría alguna patología grave ya preexistente.

Vicente Fernández López