Últimamente se habla mucho de la bacteria come carne. Prácticamente, se reporta casi cada nuevo caso que sucede. Principalmente en Estados Unidos. Y eso puede dar la sensación de que es una amenaza muy presente. Por eso, conviene recordar, que contraer este tipo de infección es algo bastante raro. Lallamada a la calma viene al caso porque la FDA (la USA Food and Drugs Administration), ha detectado doce casos producidos desde 2013, que podrían estar vinculados con el uso de un tipo de medicamentos para la diabetes tipo-2, llamados inhibidores SGLT2.
Los pacientes afectados desarrollaron un tipo de infección conocida como gangrena de Fournier, causada por bacterias del tipo come carne (como la Vibrio vulnificus) que destruyen los tejidos de los genitales. Este tipo de gangrena afecta más a los varones que a las mujeres, pero entre estos casos detectados, cinco de los pacientes eran mujeres. Este tipo de infección tiene un índice de mortalidad muy alto, aunque solo uno de estos doce pacientes falleció.
La diabetes está considerada un factor de riesgo para desarrollar la gangrena de Fournier. Pese a ello, la FDA puntualiza que este tipo de infección suele ser muy poco común, incluso entre las personas diabéticas. Se estima que se produce un caso por cada 100.000 Pacientes.
Aún así, la FDA urge a realizar más estudios, y a incluir la gangrena de Fournier entre los posibles efectos secundarios (muy poco comunes, repetimos) de este tipo de medicamentos. Y también advierte la necesidad de que los pacientes que los consumen acudan rápidamente al médico si notan signos de enrojecimiento, irritación y sudoración excesiva en la zona genital.
Fuente. IFL Science.
Vicente Fernández López