El cavernícola . En Monos y el origen de la violencia humana, el antropólogo Richard Wrangham, explica que ellas caen rendidas por los hombres más agresivos porque en ellos encuentran seguridad, aunque a veces esa agresividad se vuelve en su contra en forma de malos tratos.
Rasgos duros. Las mujeres atribuyen una mayor predisposición a procrear a los hombres con rasgos más masculinos, los mismos relacionados con carácter más violento.
Los buenos genes. Estar dotado de mejores atributos supone garantía de éxito reproductivo. Aunque estos excesos les hagan presa fácil para el depredador.
Redacción QUO