En un experimento con pacientes obesos, perder peso significó un 60% menos de riesgo de enfermedad grave en casos de infección por COVID-19

Un estudio de la Clínica Cleveland publicado en la revista JAMA Surgery muestra que entre los pacientes con obesidad, la pérdida de peso previa lograda con la cirugía bariátrica se asoció con un 60% menos de riesgo de desarrollar complicaciones graves de la infección por COVID-19.

Estudios anteriores ya han comprobado que la obesidad es un factor de riesgo importante a la hora de desarrollar síntomas graves por una infección de SARS-CoV-2, el virus que causa la COVID-19. La obesidad debilita el sistema inmunitario, crea un estado inflamatorio crónico y aumenta el riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares, coágulos de sangre y afecciones pulmonares. Todas estas condiciones pueden complicar el diagnóstico de COVID-19.

El objetivo de este estudio era examinar si una pérdida de peso en pacientes con obesidad reducía al riesgo antes de contraer la COVID-19. Se trata de una evidencia más de que la obesidad es un factor de riesgo sobre el que se puede actuar para protegerse de los peores efectos de la enfermedad.

El estudio se realizó con un total de 20.212 pacientes adultos con obesidad, De estos, un grupo de 5.053 pacientes se habían sometido a cirugía de pérdida de peso entre 2004 y 2017, y se compararon con el resto, que no habían sufrido cirugía. Los pacientes que se sometieron a cirugía bariátrica perdieron un 19% más de peso corporal que los demás antes del 1 de marzo de 2020, al comienzo de la pandemia.

Después del brote de COVID-19, los investigadores analizaron cuatro resultados relacionados con el COVID-19: tasa de infección, hospitalización, necesidad de oxígeno suplementario y enfermedad grave.

La tase de infección fue similar, sin embargo los pacientes que habían pasado por la cirugía y perdido más peso experimentaron síntomas mucho menos graves al contraer COVID-19 en comparación con los del grupo no quirúrgico. Tenían un 49% menos de riesgo de hospitalización, un 63% menos de necesidad de oxígeno suplementario y un 60% menos de riesgo de desarrollar COVID-19 grave.

Aun se desconocen los mecanismos subyacentes exactos, pero según los investigadores estos datos sugieren que los pacientes que se sometieron a una cirugía de pérdida de peso estaban más sanos en el momento de contraer una infección por SARS-CoV-2, lo que se tradujo en mejores resultados clínicos.

REFERENCIA

Association of Weight Loss Achieved Through Metabolic Surgery With Risk and Severity of COVID-19 Infection