Las alteraciones del sueño entre los 30 y los 50 podrían afectar a la memoria y capacidades cognitivas en la vejez, según un estudio reciente.

Un estudio reciente revela que las personas que experimentan alteraciones del sueño entre los 30 y los 50 podrían tener más probabilidades de enfrentar problemas de memoria y pensamiento una década después. Publicado en la revista médica Neurology, el estudio no establece que la calidad del sueño cause directamente un declive cognitivo, sino que muestra una asociación entre ambos​​.

El autor del estudio, Yue Leng, PhD, de la Universidad de California en San Francisco, enfatiza la importancia de la calidad del sueño sobre la cantidad para la salud cognitiva en la mediana edad. Esta conexión es crucial para entender el papel de los problemas de sueño como factor de riesgo para enfermedades como el Alzheimer​​.

En el estudio participaron 526 personas con una edad promedio de 40 años, quienes fueron seguidas durante 11 años​​. Los investigadores evaluaron la duración y calidad del sueño de los participantes, quienes llevaron un monitor de actividad en la muñeca durante tres días consecutivos en dos ocasiones, aproximadamente con un año de diferencia. Además, completaron un diario de sueño y una encuesta de calidad del sueño, donde puntuaciones más altas indicaban peor calidad del sueño. Un 46% de los participantes reportó un sueño de mala calidad​​.

Además de las pruebas de memoria y pensamiento, los investigadores examinaron la fragmentación del sueño, que mide interrupciones cortas y repetitivas del sueño. Descubrieron que los participantes tenían una fragmentación promedio del sueño del 19%​​. Al dividir a los participantes en tres grupos basados en su puntuación de fragmentación del sueño, encontraron que aquellos con el sueño más interrumpido tenían más del doble de probabilidades de tener un rendimiento cognitivo deficiente una década después, en comparación con aquellos con el sueño menos interrumpido​​.

Leng señala la necesidad de más investigación para evaluar la conexión entre las alteraciones del sueño y la cognición en diferentes etapas de la vida, lo que podría abrir nuevas oportunidades para la prevención del Alzheimer en el futuro​​. El estudio, financiado por el Instituto Nacional sobre el Envejecimiento y el Instituto Nacional del Corazón, los Pulmones y la Sangre, admite como limitación su tamaño de muestra reducido, lo que impide investigar completamente las diferencias potenciales de raza o género​​.

REFERENCIA

Association Between Sleep Quantity and Quality in Early Adulthood With Cognitive Function in Midlife