Un estudio efectuado por investigadores de la Universidad de Granada ha demostrado que el tiempo máximo que un escalador es capaz de soportar hasta “caer” agotado es lo que determina su rendimiento.
El estudio, que ha sido publicado en el European Journal of Applied Physiology, analizó los parámetros fisiológicos que determinan el rendimiento en este deporte. Los participantes, ocho mujeres con un nivel medio de 7a (el baremo de dificultad de una vía de escalada con grados de 5 a 9, y subgrados de a, b y c) y ocho hombres con un nivel medio de 8a, fueron divididos en “grupo experto” y “grupo élite”.

Una vez obtenidos los dos grupos, los científicos, liderados por Vanesa España Romero, quien ha participado de la Copa de España Juvenil de Escalada en años pasados, se evaluó a los escaladores con pruebas de composición corporal (peso, altura, índice de masa corporal, % de grasa corporal, densidad mineral ósea, y contenido mineral óseo), cineantropométricas (longitud de brazos, manos y dedos, densidad mineral ósea y contenido mineral óseo del antebrazo), y pruebas de condición física (flexibilidad, fuerza del tren superior e inferior y capacidad aeróbica medidas en un rocódromo).

Los resultados muestran que no hay diferencias significativas en los grupos en ninguna de las pruebas realizadas, excepto en el tiempo de escalada hasta la extenuación y en la densidad mineral ósea, siendo ambas mayores en el grupo de élite. «Por tanto – explica Vanesa España Romero – el tiempo máximo que el deportista es capaz de aguantar escalando hasta el agotamiento es el determinante exclusivo del rendimiento. Así, estos hallazgos podrían ayudar a entrenadores y deportistas en el diseño de programas de entrenamiento de escalada deportiva con el objetivo de mantener los primeros puestos que España está consiguiendo a nivel mundial”.

Redacción QUO