Buscar lugares diferentes para hacer el amor tiene sus riesgos (¡cuidado con las esquinas!), y el colchón, aunque cómodo, aburre. Esta cotidiana preocupación para las parejas es la que ha movido a dos artistas mexicanos, Xanath Lammoglia y Andrés Amaya, a diseñar un mobiliario estrictamente pensado para el coito. Algunas de las sillas, realizadas en su mayor parte con materiales sintéticos, rinden homenaje a las mujeres de la Revolución Mexicana, mientras que otras están basadas en películas como El cartero siempre llama dos veces. www.balastudio.com
Redacción QUO