El descubrimiento de restos fósiles de un primate desconocido hasta ahora ofrece nuevas pistas sobre cuándo surgieron hominoides (humanos y simios) y cercopitécidos (monos del Viejo Mundo) a partir de un ancestro común, un punto clave en la evolución humana. Es la investigación de portada de esta semana en la revista Nature.
El hallazgo prueba que la divergencia ocurrió en un periodo entre los 29-28 y los 24 millones de años, más tarde de lo que se creía previamente, El trabajo servirá para llenar algunos huecos cruciales en nuestro conocimiento sobre los orígenes del ser humano, según sus responsables, un equipo de investigadores de la Universidad de Michigan (EE.UU) dirigidos por William Sanders.
Los investigadores han descubierto en Arabia Saudí parte de un cráneo de una nueva especie de primate datado entre hace 29-28 millones de años, de tamaño medio y un peso de entre 15 y 20 kilos.
Redacción QUO