A pesar de ser una actividad natural, la masturbación todavía genera muchas dudas. Una muy común es saber si se considera lo más adecuado antes de tener un encuentro sexual. En las respuestas afloran muchas creencias erróneas y, a veces, disparatadas, como que puede dejar el pene desensibilizado o provocar una mayor erección. Son ideas sin ninguna consistencia científica, según un estudio publicado en The Medical News Today, cuya principal conclusión es que masturbarse antes del sexo puede ser un juego divertido y estimulante en esos momentos previos a la relación en pareja.

En hombres que sufren eyaculación precoz u otras disfunciones sexuales, puede que la masturbación previa le ayude a liberar la energía sexual acumulada para poder concentrarse luego en el pleno disfrute sexual, y no solo en el orgasmo. Pero hay que hablar también del periodo refractario, que es el tiempo de recuperación antes de volver a tener un orgasmo. Un estudio publicado en BJU International concluye que el cuerpo libera más prolactina después del orgasmo. Esta hormona bloquea el placer sexual durante el periodo refractario.

La Sociedad Internacional de Medicina Sexual señala que el periodo refractario no dura más que unos minutos en los hombres más jóvenes, pero a medida que aumenta la edad pueden necesitar incluso hasta 24 horas. Después de esto, pueden lograr erecciones y orgasmos sin inconveniente.

Para los hombres que experimentan erecciones más suaves o que tienen dificultades para lograr una erección, masturbarse antes del sexo puede hacer que sea aún más difícil obtener una segunda erección a tiempo para el coito.

Para las mujeres, la duda está disipada. Masturbarse antes del sexo puede reducir la tensión y subir su nivel de excitación. De todos modos, los expertos aseguran que la mejor manera de descubrir los beneficios de la masturbación antes del sexo es intentarlo. Las necesidades sexuales de cada persona son diferentes. Aprender a explorar estas necesidades sexuales solo y con un compañero puede ayudar a llevar a una experiencia sexual más enriquecedora.

Marian Benito