Pues por desgracia, por el mercadeo de ‘huevitos’. Un Twittergate en toda regla. Políticos y famosos están usando cuentas falsas para aumentar su número de seguidores en la red social de microblogging, y con ello potenciar un carisma que parece que no saben cubrir por medios más honestos. Por ello, una empresa británica ha desarrollado un programa para identificar a los usuarios falsos, dejando al descubierto la magnitud del engaño.
Es el caso por ejemplo de Mervyn Barrett, candidato para la jefatura de policía de Lincolnshire y comisario de la delincuencia, quien parece tener mucho éxito entre los fans de Justin Bieber y actores porno brasileños. Su cuenta creció en menos de un mes de 330 a 17000. La mayoría de seguidores procedían de América Latina, el sudeste de Asia y los EEUU. No obstante las mismas fuentes aseguran que el engaño no procede del policía sino de algún “seguidor muy entusiasta”. Como entusiastas debieron ser los fans del ex diputado conservador Louise Mensch, quien tras analizar su cuenta con la herramienta se descubrió que tenía más de 40.000 falsos seguidores.
Redacción QUO