Un estudio de la Universidad de Viena dirigido por Ulrich Tran y publicado en la revista Cortex revela nuevos detalles sobre laminoríamasculina zurda (cerca del 10 por ciento del total de la población): durante los meses de noviembre, diciembre y enero el porcentaje de hombres nacidos con zurdera es 10,5 por ciento, mientras que durante el resto del año, el porcentaje baja al 8,2.

La investigación, que contó con dos muestras independientes de 13.000 hombres y mujeres de Austria y Alemania, no apreció una desequilibrio tan marcado en el genéro femenino.

Ulrich Trans no creé este fenómeno esté vinculado a la “oscuridad” reinante durante los meses de noviembre a enero, sino a la “relativa luminosidad” durante los meses de mayo a julio. Una teoría que complementa la polémica tesis de los neurólogos Norman Geschwind y Albert Galaburdam que en 1980 aseguraron que la testosterona retarda la maduración del hemisferio izquierdo del cerebro durante el desarrollo embrionario, lo que explica que el hemisferio derecho sea más dominante en los diestros, y el izquierdo, en los zurdos.

Dado que el nivel de testosterona de la madre está asociado a factores externos como la luz diurna, el efecto de la estacionalidad sobre la zurdera es muy plausible, asegura el estudio.

Redacción QUO