Por tercer año consecutivo, la población española ha registrado un número de defunciones superior al de nacimientos. Y esa tendencia parece que no va a cambiar en un futuro próximo. Y, por eso, nos hemos preguntado que ocurriría si se prolongase de forma indefinida. ¿Podría llegar el caso de que una ciudad como Madrid quedara desierta?
Según los cálculos realizados por el INI, para el año 2018, la población de la capital de España habrá aumentado en un 10%, debido mayoritariamente al flujo de personas procedentes de otras ciudades y provincias. Pero, ese aumento será menor que el que la ciudad había tenido en períodos anteriores, que estaba en torno a una media del 15%.
Según fuentes del citado organismo, el crecimiento de la población de Madrid será cada vez más lento hasta volverse negativo a finales del siglo XXI. Es decir, que la capital, en lugar de ganar habitantes los irá perdiendo. De todas formas, ese descenso, aunque paulatino, será muy lento lo que implica que, aunque no hubiera flujos migratorios procedentes del extranjero, tendrían que pasar por los menos tres siglos antes de que la ciduad quedase completamente desierta.
De todas formas, el INI también augura que el descenso demográfico afectará a todo el país de tal forma que, de mantenerse las constantes actuales, podríamos pasar de los casi 47 millones de habitantes de ahora, a 41 en el año 2052. Por supuesto, habrá ciudades que lo sufritán más que otras. Y, según las estimaciones realizadas, lugares como León, Jerez o Barbate, son firmes candidatos a ver como gran parte de su población desaparece por la falta de nacimientos y por la partida de muchos de sus vecinos para buscarse la vida en otros sitios.
Con todo, no parece factible que ninguna de las actuales capitales de provincia en España corra serio riesgo de convertirse en una ciudad fantasma antes de dos siglos.
Redacción QUO