La nueva generación de coches autónomos ha generado un debate ético que no nos esperábamos y que no resulta fácil de responder. Si uno de estos vehículos no puede frenar y tiene delante a varios transeúntes, ¿para qué debe estar programado? ¿Para atropellarlos y salvar la vida del conductor? O, por el contrario, ¿para girar y chocar contra una pared, salvando a los peatones pero matando al tripulante?
Cómo ya hemos dicho, no es una decisión fácil de tomar, pero en Mercedes -Benz ya lo han hecho. Tal y como declaró Chritoph von Hugo, responsable de los sistemas de asistencia al conductor de la marca, en una entrevista concedida a nuestros compañeros de Car and driver (edición USA): “Todos nuestros coches autónomos darán prioridad a los pasajeros que lleven dentro. Si sabes que puedes salvar una vida al menos, esta debe ser la del pasajero del vehículo”.
Sin duda, es una decisión polémica, ya que muchas personas argumentarán que se prioriza la vida de los conductores sobre la del resto de personas. Aunque los partidarios de estos vehículos se defienden asegurando que estas situaciones no serán habituales, y que los coches autónomos podrían llegar a evitar más del 90% de los accidentes de tráfico.
En Quo ya publicamos un completo artículo hablando sobre esta espinosa cuestión, y también otro magnífico reportaje en el que nuestra especialista en temas de motor probó uno de estos vehículos para explicar a los lectores su pros y sus contras. ¿Os interesa descubrirlos?
Fuente: Car and driver.
Vicente Fernández López