La Universidad Royal Holloway de Londres acaba de publicar una investigación sorprendente. Según sus conclusiones, algunos sesgos raciales son interpretados por nuestro cerebro según las señales de su corazón.

Según explican en Nature Communications, las personas con sesgos raciales pueden ser más propensos a interpretar mal una determinada situación según el momento en el que su corazón se encuentre. Para llegar a estas conclusiones, los investigadores contaron con 32 voluntarios, a los que monitorizaron el ritmo cardíaco mientras les enseñaban imágenes de personas de raza blanca y negra con objetos que podían ser armas, herramientas manuales o un teléfono.

Fue así como se percataron de que cuando la imagen se presentaba durante el latido del corazón (sístole) en lugar de entre los latidos (diástole) los participantes eran en torno a un 10% más propensos a tomar el objeto como si fuese peligroso en lugar de inofensivo cuando este estaba en manos de una persona negra.

Según ha explicado Manos Tsakiris, autor principal de la investigación, a la Agencia SINC: «El corazón y el cerebro, los dos órganos más importantes del cuerpo, participan en un diálogo constante. Con cada latido, el corazón envía señales al cerebro informándole sobre sobre su ritmo cardíaco y la presión arterial. Le informa sobre el contexto fisiológico dentro del cual tienen lugar los procesos cerebrales y la cognición –por ejemplo, la percepción–».

Fuente: Agencia SINC

Redacción QUO