El arquitecto Norman Foster va a construir en Moscú el que será el edificio más grande del mundo.
Con una altura de 457 metros y una base de dos millones de metros cuadrados, Crystal Island será una miniciudad de lujo que se elevará en espiral, y que albergará una universidad, hoteles, cines y apartamentos para públicos elitistas.
Las obras, que comenzarán en 2013, tendrán un coste de 4.000 millones de dólares.
Nada más ver los bocetos que muestran el aspecto que tendrá esta megaconstrucción, los moscovitas han dado señales de un gran sentido del humor bautizándola con el apodo de “el árbol de Navidad”.
Redacción QUO